Arte en Doha.

Foto: Alejandra de Argos

Mi percepción del viaje comienza observando desde la ventanilla del avión la árida península arábiga y comprendiendo porqué somos 7.000 millones de habitantes en el mundo. Esto es debido a que nuestra especie se ha adaptado desde sus orígenes a sobrevivir en todo tipo de entornos y circunstancias. Siendo el animal peor dotado de la naturaleza, ha conseguido gracias a su inteligencia y habilidad técnica, suplir sus carencias y dominar el medio.

Doha, capital de Qatar, pequeño emirato árabe de la Península Arábica me recibió con una inmensa luna llena iluminando un mar negro. Parecía sacado de una foto de Sugimoto. Una oscuridad solo rota por las luces de algún barco.
Este emirato del Golfo Pérsico, antaño dedicado a la pesca y recolección de perlas, sufrió un cambio drástico al descubrirse grandes reservas de petróleo y gas, lo cual llevó a transformar totalmente la economía del país.

Foto: A de A

Solamente contaba con un día y medio en Doha y quería llevarme una impresión de lo que es esta ciudad. Los museos se cierran a las 5 de la tarde por lo que tenía que darme prisa. Los dos museos más importantes de Doha son el Mathfa, Museo de Arte Moderno y Contemporáneo y el Museo de Arte Islámico.

F:A de A. Ismail Fattah

F:A de A. Esculturas de Adam Henein

Comencé acercándome al Museo de Arte Contemporáneo. Mathaf tiene una pequeña colección de arte moderno árabe representado por unos pocos artistas. Abarca desde 1840 hasta el momento actual en un espacio de 5500 metros cuadrados. Me impactó la escultura de la entrada, elogio a la fortaleza humana. Desgraciadamente no supe  quien era su autor.

F:A de A. La Vase Abominable

Desconociendo lo que me iba a encontrar, me sorprendió una impresionante instalación hecha con bombas del argelino, Adel Abdessamen, artista conceptual con un lenguaje muy singular. No daba crédito a la envergadura de la exposición que me había encontrado. ( hablaré posteriormente sobre ella ).

Foto:A de A. Shams de Adel Abdessamen

Foto:Alejandra de Argos. Museo de Arte Islamico

Al día siguiente, me desplacé a conocer el Museo de Arte Islámico diseñado por el arquitecto estadounidense de origen chino Ieoh Ming Pei, el mismo que diseñó la pirámide del Louvre. Es un edificio que impacta nada más entrar debido a sus dimensiones y limpieza de líneas. Su inspiración procede de la mezquita de Ibn Tulun de El Cairo.  El museo alberga una colección muy variada donde se puede encontrar desde textiles, cerámicas, armaduras y  joyas hasta manuscritos de tres continentes distintos en un recorrido que va desde el sVII hasta el sXX. La colección está exquisitamente expuesta pero lo que realmente destaca es el edificio que la contiene, erigido al final de la Corniche de Doha.

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Después de visitar el Museo de Arte Islámico se puede ir paseando hasta el espacio de exposiciones  ALRIWAQ DOHA.

Foto:Alejandra de Argos. Alriwaq Doha. Damien Hirst

Foto:Alejandra de Argos. Damien Hirst

Me encontré con una magnífica exposición de Damien Hirst, máximo  representante de los Young British Artist y uno de los artistas contemporáneos de más éxito. Es la mayor exposición que se ha realizado sobre este artista, superando incluso la que vi en la Tate en 2012 que fue extraordinaria. Aquí se podía hacer un recorrido por los 25 años de carrera de este artista y ver obras que nunca antes se habían expuesto. El espacio era magnífico, salas de enormes proporciones para presentar una obra de lo más heterogénea. El encargado de llevarla a cabo es una persona bien conocida en el mundo del arte, Francesco Bonami, escritor, crítico y curator del Museo de Arte Contemporáneo de Chicago.
La exposición expresa su relación con el arte, con el amor y sobre todo con la vida y la muerte, una de sus grandes obsesiones, como la de tantos artistas. La muestra hace un recorrido por toda su obra desde los años 80 donde se pueden encontrar sus icónicas obras como los animales en formol o los Spot Painting.
( hablaré posteriormente sobre ella).

Foto:Alejandra de Argos. Zoco Waqif

Mi siguiente visita fue el zoco Waqif, donde puedes zambullirte en la atmósfera de la ciudad con sus puestos de especias, frutos secos, inciensos, textiles y sobre todo su mercado de pájaros. La construcción es maravillosa pero al haber sido restaurada le quita mucho encanto, nada que ver con los típicos zocos marroquíes.

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Enfrente del zoco Waqif se levanta la Mezquita Fanar, Centro Cultural Islámico de Doha. Su minarete en espiral la hace muy especial. En éste centro se pueden recibir clases de árabe o aprender más sobre el Islam y esta permitida la entrada en la Mezquita para los no musulmanes. Yo no tuve tiempo para visitarla en su interior pero pude apreciar su singular arquitectura desde la entrada al zoco.

Foto:Alejandra de Argos. Mezquita Fanar.

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Y finalmente, para terminar con mi visita me di un paseo por la bahía de Doha donde a lo lejos descubrí la monumental escultura de acero Corten que ha erigido Richard Serra en Oriente Medio.

 Mis recomendaciones:

ALRIWAG DOHA, enfrente del Museo de Arte Islámico. Exposición de Damien Hirst, RELICS. Desde 10 de Octubre 2013 hasta el día 22 de Enero de 2014.

MATHAF: Arab Museum of Modern Art. Exposición de Adel Abdessemed, L'ÂGE  D'OR. Desde el día 6 de Octubre de 2013 hasta el 5 de Enero de 2014.

MIA: Museum of Islamic Art.

SOUQ WAQIF. Zoco de Doha.

FANAR MOSQUE. Centro Cultural Islámico. Mezquita enfrente del zoco.

CORNICHE. Paseo por la bahía de Doha.